Mantenimiento y Reutilización de los Adoquines Cerámicos


Mantenimiento

Siguiendo las recomendaciones de ejecución de pavimentos flexibles y rígidos con adoquines cerámicos, el mantenimiento de la pavimentación con adoquín cerámico es muy bajo y proporciona una gran superficie durante décadas, debido a las extraordinarias características de este tipo de pavimentación y del adoquín cerámico en concreto (ver apartado "Adoquín Cerámico - Ventajas de los pavimentos con adoquín cerámico").

Las tareas de conservación únicamente se limitan al relleno de juntas con arena de sellado cada cierto tiempo, debido a la acción erosiva de los agentes climatológicos y ambientales, con el fin de que la respuesta a las solicitaciones se mantenga en un nivel satisfactorio.

No obstante, durante la exposición, tanto a tráfico rodado como peatonal, en la vida útil del pavimento, da lugar a posibles apariciones de suciedades y manchas.

La identificación de las manchas y la posterior aplicación del limpiador adecuado harán factible la limpieza exhaustiva del pavimento.

A continuación se exponen una serie de manchas más habituales y el procedimiento de limpieza a emplear para cada una de ellas:

  • Residuos y manchas de mortero

Quitar la mayor cantidad posible mediante cepillado para después lavar con una solución de ácido clorhídrico (con dosificación de 1 parte de ácido por 10 partes de agua, en volumen). No se recomienda usarlo en una concentración mayor.

  • Alquitrán

Eliminar la mayor parte con espátula, aplicar después una pasta a base de parafina y polvo inerte o bien tricloroetileno o tetracloruro de carbono.

  • Asfalto y emulsiones asfálticas

Enfriar con hielo, raspar y frotar la superficie con polvos abrasivos. Posteriormente, se aclara con agua.

  • Oxido de hierro

Lavar la superficie manchada con una solución de: 600 grs de ácido oxálico 220 grs de fluoruro sódico 150 grs de ácido cítrico 10 litros de agua

Se puede aplicar también una mezcla de glicerina, citrato sódico y agua (relación 7:1:6), añadiendo un polvo inerte para conseguir una pasta, la cual se aplicará sobre la mancha durante varios días.

  • Manchas de arcilla

Raspar el material seco, frotar y aclarar con agua caliente y detergente.

  • Humo

Normalmente desaparecen lavando con detergente común, en las zonas donde sea más persistente se puede utilizar una pasta formada por tricloroetileno y polvo inerte.

Debe existir una buena ventilación cuando se usa en interiores.

  • Pintura

Aplicar algún disolvente comercial y lavar después con agua. Se puede utilizar también una solución de fosfato trisódico y agua (1:5 en peso), cuando la pintura se reblandezca se elimina la mancha mediante cepillado o espátula. Lavar después con agua jabonosa y posteriormente con agua limpia.

  • Chicles

Helar cada trozo de chicle con aerosol de dióxido de carbono o con hielo. Después proceder a arrancar el chicle con un rascador de alto rendimiento por medios mecánicos o hidráulicos.

Previamente al proceso de limpieza se recomienda realizar alguna prueba para evaluar el tratamiento a emplear.

No se recomienda limpiar la superficie mientras el chicle esté pegajoso.

  • Aceite y grasa

El tratamiento depende del tipo de aceite, ya que si se trata de aceites minerales pueden ser adecuados petróleo o gasolina con polvo inerte, mientras que si son aceites vegetales son más idóneos otros disolventes como aguarrás o tetracloruro de carbono.

  • Hongos y musgo

Pueden eliminarse con una solución de silicofluoruro de magnesio y agua (1:40 en peso).

Rodadas de neumáticos

Frotar el área manchada con agua, detergente y polvos quitamanchas.

  • Graffitis

Existen productos específicos para tal fin. Aplicar estos productos con brocha o rodillo, dejando entre 5 y 15 minutos para que actúe en función de la temperatura ambiente, se produce un reblandecimiento y ampollamiento de la pintura que se retira a continuación con espátulas o agua a presión.

  • Madera

Las manchas producidas por agua que ha permanecido en contacto con madera, se eliminan con una solución de ácido oxálico y agua (1:40 en peso).

Es importante en este apartado no olvidar los siguientes puntos fundamentales:

  • Siempre que se utilice un producto químico, lavar abundantemente con agua limpia antes y después del tratamiento, así como canalizar el agua sucia de forma que no alcance otras partes de la obra.
  • Utilizando una técnica incorrecta para la eliminación de cualquier tipo de mancha se puede producir un daño permanente, en consecuencia cualquier propuesta de método de limpieza debe ensayarse en una pequeña zona discreta, esperar al menos una semana y después juzgar los resultados.

Reutilización

La pavimentación flexible con adoquín cerámico ofrece la ventaja, entre otras muchas, de la posibilidad de levantamiento de los adoquines cerámicos sin provocar deterioros en los mismos, en el caso de que, por ejemplo, sea necesario reparar algún servicio urbano, pudiendo en consecuencia volver a ser reutilizados. Esta propiedad hace también que resulte especialmente indicado en zonas que aún no poseen todos los servicios públicos instalados.

Esta reutilización de los adoquines cerámicos en pavimentación flexible ofrece un ahorro económico importante, debido al material a emplear (el propio adoquín cerámico levantado), a la disminución en los tiempos de la reparación, etc, evitando además los habituales "parches" que se producen en otros pavimentos.

Cada vez adquiere mayor protagonismo el uso y las ventajas de esta pavimentación, ya que actualmente, para intentar controlar el número total de zanjas que se abren y reducir los problemas que causan a peatones y conductores, los ayuntamientos están aprobando nuevas Ordenanzas de Obras en la Vía Pública, sancionando incluso a las empresas reparadoras por no pavimentar adecuadamente la acera levantada o por incumplimiento de los plazos de obras fijados por los Ayuntamientos.

En las reparaciones del subsuelo, el procedimiento de apertura y rehabilitación del pavimento de adoquines cerámicos se compone de los siguientes pasos:

1º.- Quitar la máxima cantidad de arena posible de las juntas, empleando una paleta u otra herramienta adecuada.

2º.- Levantar el primer adoquín cerámico usando palancas adecuadas.

3º.- Los restantes adoquines cerámicos se levantan con menores problemas (sin trabazón), usando una pata de cabra u otra herramienta adecuada, hasta el levantamiento de toda la superficie necesaria para poder realizar las operaciones de reparación del subsuelo.

4º.- Limpieza con cepillo de alambres de los adoquines cerámicos levantados y apilamiento al lado de la zanja para su posterior recolocación.

5º.- Excavación de las siguientes capas y reparación, mantenimiento o instalación de los servicios urbanos correspondientes.

6º.- Reposición y compactación, si fuese necesario, de las capas inferiores del firme y, extensión y nivelación de la capa de arena del adoquinado cerámico.

7º.- Recolocación de los adoquines cerámicos, anteriormente levantados y limpiados, ajustados con martillo de goma.

Se recomienda volver a colocar los adoquines cerámicos con las caras en la misma posición en la que estaban, con el objeto de evitar posibles cambios de tono en el pavimento.

8º.- Llenado de juntas y compactado según el método descrito en el apartado '"Ejecución de Pavimentos Flexibles con Adoquín Cerámico - Llenado de juntas y compactado"'

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Enlaces Externos

  Nota: Este artículo ha sido creado gracias a la Hispaliyt - Asociación Española de Fabricantes de Ladrillos y Tejas de Arcilla Cocida.) en el marco del Programa de Afiliados de la Construpedia. El contenido está disponible en el sitio web de Hispalyt

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