Encargado COEX - Procedimientos de Conservación y Explotación: Procedimientos

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Procedimientos

Las fichas de procedimientos pretenden, básicamente, ayudar al responsable de la organización última de la actividad a programarla, especialmente en aquellos casos en los que no disponga de experiencia al respecto, toda vez que, en caso de tratarse de una actividad de ejecución habitual, ya será sobradamente conocido el procedimiento que hay que seguir.

No obstante lo anterior, en cualquier caso, aun cuando el encargado pueda conocer de antemano perfectamente el desarrollo de la actividad concreta que se ha de realizar, procede la lectura de la ficha de procedimientos correspondiente por éste, ya que le servirá de recordatorio acerca de la necesidad de vigilar estrechamente el cumplimiento de las normas, tanto en lo relativo a la señalización de los trabajos como en cuanto a la prevención de riesgos laborales y medio ambiental.


Los procedimientos contemplados en virtud del tipo de operación que se ha de realizar y de su categoría se han clasificado según tres niveles con cinco categorías en cada uno; así, los niveles considerados son los siguientes:

- Procedimientos rutinarios o básicos. En ellos se incluyen aquellos cuya actividad presenta carácter ordinario.
- Procedimientos principales. Abarca los procesos que admiten programación diferida con plazos medios o largos, lo que permite planificar con mayor facilidad, a la vez que generar una sistemática de trabajo adecuada.
- Procedimientos de mejora y rehabilitación. Incluyen las operaciones orientadas, entre otras cosas, a conseguir solventar los deterioros por uso, aumentar la eficacia del sistema, evitar deterioros excesivos de los diferentes elementos de la vía, etc.


Las categorías en las que se clasifican los procedimientos dentro de cada uno de los niveles anteriores, a su vez, en correspondencia con los grupos de elementos más representativos en los procesos de mantenimiento y explotación de carreteras, siguen las siguientes pautas:

- Obras de drenaje.
- Obras de fábrica.
- Plataforma y sus bordes.
- Señalización.
- Varios; para incorporar todas aquellas actividades de difícil clasificación en las anteriores.


Así, la nomenclatura empleada para codificar los diferentes procedimientos se plantea del siguiente modo:

- La primera letra, B, P o M, representa cada uno de los niveles anteriores: procedimientos básicos o rutinarios, procedimientos principales y procedimientos de mejora y rehabilitación.
- Las siguientes dos letras, DR, OF, PL, SE o VA, responden al grupo de procedimiento del que se trate, en correspondencia con las obras de drenaje, las obras de fábrica, la plataforma y sus bordes, la señalización y varios.
- Finalmente, se numera con dos cifras cada procedimiento en cuestión.


En lo relativo a la organización de las fichas de procedimientos, cabe observar que se pueden distinguir dos partes: la primera en forma de texto y la segunda en forma de cuadro.

La primera parte, denominada "de texto", se inicia con la definición de la operación objeto de la ficha, seguida de un breve comentario acerca del objeto que justifica la actividad de la que se trate.

- En primer término, se enuncia la necesidad de conocer el alcance real de los trabajos, con los aspectos más significativos que hay que considerar.
- Seguidamente se indica la necesidad de proceder a la programación de los trabajos por parte del encargado con la indicación, ya comentada, de rellenar adecuadamente la ficha previa al inicio de los trabajos, así como con las observaciones oportunas al respecto.
- Se manifiesta a continuación la conveniencia de proceder a la ejecución de los trabajos siguiendo el proceso indicado en las fichas.
- Más tarde se recuerda la necesidad de garantizar el cumplimiento de la normativa relativa a señalización, a la prevención de riesgos laborales y a la preservación del medio ambiente, con las observaciones que proceda en cada caso.
- Finalmente, se exponen diversas recomendaciones en aras del cumplimiento de la ficha que hay que rellenar a la finalización de los trabajos. En este apartado se pretende ofrecer algunas indicaciones que permitan al encargado observar el entorno en el que se desarrollan los trabajos, de modo que pueda detectar los problemas relacionados con la conservación y el mantenimiento de la vía que pudiera haber en él. De este modo, se podrá completar la ficha correspondiente con los comentarios que proceda, derivados de dichas observaciones, lo que favorecerá la aplicación de las medidas correctoras correspondientes.

Cabe destacar el hecho de que en el texto correspondiente, se hace mención de los apartados específicos que procede consultar, correspondientes a los libros de Medio Ambiente y de Prevención de Riesgos, para la correcta ejecución de los trabajos. No obstante lo anterior, deberán consultarse las consideraciones de carácter general expuestas en los textos indicados.


La segunda y última parte de las fichas, la enunciada en forma de cuadro, presenta diversas características que se comentan a continuación:

- En primer lugar, se encabeza con los datos representativos de la actividad en cuestión, como: nombre de la actividad, tipo (rutinaria o básica, principal o de mantenimiento y rehabilitación), código (visto anteriormente), frecuencia de realización de la actividad (en los casos de procedimientos rutinarios y principales) y descripción somera de la actividad.
- A continuación, se exponen los siguientes apartados:
  • Estimación de necesidades de mano de obra, de equipos, de materiales y de herramientas, planteadas siempre con carácter estimativo, y que precisan adaptación a cada caso concreto, sea por razón de disponibilidad de cada uno de los elementos anteriores, por razones de diferente índole, como el tipo de vía, la climatología, etc.
  • Rendimiento medio esperable, siempre en función de las estimaciones hechas en el apartado anterior, si bien, como es natural, entendiendo variable al variar asimismo los parámetros considerados en cada caso.
  • Procedimiento propiamente dicho, en el que se contempla la secuencia elemental de operaciones que hay que realizar. En ningún caso se pretende mostrar una relación exhaustiva de los pasos que se han de seguir, sino más bien enunciar los más importantes, a la vez que relacionar los puntos críticos del proceso junto a aquellos otros en los que, por diversas razones, interese intensificar el control y la vigilancia de las operaciones.

Cabe observar, finalmente, una última aplicación de las fichas de procedimientos consistente en facilitar a los encargados la preparación de las actividades permitiendo, asimismo, rellenar más fácilmente las fichas de organización correspondientes.

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