Introducción. Estrategias de Incidencia Política desde la Sociedad Civil: Industrias Extractivas en Ecuador y Chad

De Construmatica


Logo isf 1.gif Nota: Este artículo ha sido creado gracias a la Ingenieros Sin Fronteras en el marco del Programa de Afiliados de la Construpedia. El contenido está disponible en el sitio web de Ingeniería Sin Fronteras
¡Atención! Esté artículo está sujeto a Derecho de Autor.


El debate sobre del papel que deberían desempeñar las industrias extractivas dentro del desarrollo social y económico de los países del Sur ha captado progresivamente la atención de los expertos en desarrollo, así como de los académicos y la sociedad civil. Ésto se debe, en gran medida, al impacto negativo que las actividades de extracción de recursos naturales han causado en todo el mundo.

Aunque tradicionalmente se ha tenido por cierto que el desarrollo de la industria petrolera conducía a un aumento de la prosperidad del país y del bienestar de la población, la realidad nos muestra una situación bastante diferente.

Todavía no se ha dado el caso de que un país pobre, aunque rico en recursos naturales, haya alcanzado, bajo este modelo, un nivel de desarrollo sostenible.

De hecho, los estudios muestran que la industria del petróleo a menudo es más una maldición que una bendición.

Casi por sistema la situación de pobreza se ha visto agravada por las políticas de desarrollo centradas exclusivamente en la explotación de recursos naturales. Además, este tipo de desarrollo en países que cuentan con instituciones públicas débiles suele aumentar los niveles de corrupción en la esfera pública.

A esto se añade una mayor represión por parte de las elites dominantes, elites que se niegan a que se revise públicamente la administración de los ingresos procedentes del petróleo y que se cierran en banda ante cualquier demanda de rendición de cuentas y transparencia.

La explotación de recursos naturales, en especial de petróleo, ha causado con frecuencia una enorme destrucción medioambiental. Muchos ecosistemas han sufrido estragos, comunidades indígenas se han visto diezmadas y en muy pocas ocasiones se ha compensado adecuadamente a las poblaciones en cuyas tierras se encontraban los yacimientos, y de las cuales dependían para vivir. A todo esto se le añade la frecuente inestabilidad política y violencia generada directa e indirectamente como consecuencia de la explotación de petróleo en estas zonas.

Organizaciones de la sociedad civil, tanto nacionales como internacionales, han desempeñado un papel muy importante al oponerse y manifestar su desacuerdo ante los impactos negativos de la explotación petrolera, a la que muchos se refieren con la expresión la maldición de los recursos.

Estas organizaciones han llevado a cabo múltiples iniciativas para difundir información, aumentar la conciencia social y encontrar vías alternativas para el desarrollo sostenible de sus países. Además, la sociedad civil ha comenzado a aprender cómo reaccionar y presionar a las corporaciones multinacionales, que son las que suelen plantear, diseñar y llevar a cabo las explotaciones en los países más desfavorecidos. Se trata de un gran desafío, dado que no se cuenta con un marco legal a nivel internacional y nacional que obligue a las transnacionales a rendir cuentas y asumir la responsabilidad de las consecuencias de sus acciones.

El desarrollo de la industria petrolera en Ecuador y Chad ha seguido una línea similar a la de otros países productores del Hemisferio sur.

En ambos casos, las multinacionales han mantenido un dominio completo del sector, a lo que se le ha añadido la inoperancia y la pasividad de los gobiernos, que, además, han sufrido la presión continua de las instituciones financieras internacionales en favor de la expansión industrial petrolera.

Conviene añadir que, de no ser por el esfuerzo de la sociedad civil, otros aspectos, como el cuidado del medio ambiente o el respeto a los derechos humanos habrían pasado totalmente inadvertidos.

Este documento ofrece una visión general acerca de la respuesta de la sociedad civil al impacto negativo del desarrollo de la industria del petróleo en Chad y en Ecuador.

El objetivo es ofrecer una primera aproximación a las cuestiones que esta situación ha generado, y cómo la sociedad civil ha respondido en cada caso.

De este modo se pretende establecer un punto de partida para aquellas personas interesadas en el trabajo de incidencia política en el sector de las industrias extractivas.

Sin duda, son muchos los problemas y los retos que plantea la industria petrolera, y es necesaria una verdadera implicación de todos los actores si de verdad deseamos llegar a soluciones reales y duraderas para los problemas que las comunidades de todo el mundo están padeciendo como consecuencia del petróleo. La esperanza es que más personas puedan concienciarse con lo que ocurrió y continua ocurriendo en países como Ecuador y Chad y se involucren en la búsqueda de soluciones alternativas al desarrollo de los países en vías de desarrollo.

Artículos Relacionados