Métodos de Ensayo del Hormigón no Destructivos: Ultrasonidos.

De Construmatica

Revisión del 21:05 18 jul 2007 de imported>Laura Mañas
(difs.) ← Revisión anterior | Revisión actual (difs.) | Revisión siguiente → (difs.)
Itec.gif - LogoGeneralitatCataluna.PNG NOTA: Este artículo ha sido creado gracias al Instituto de Tecnología de la Construcción de Cataluña - ITeC, y la Direcció General d'Arquitectura i Habitatge de la Generalitat de Catalunya, en el marco del Programa de Afiliados de la Construpedia. Pertenece a la publicación Recomendaciones para el reconocimiento sistemático y la diagnosis rápida de forjados construidos con cemento aluminoso. Puedes descargar gratuitamente la publicación [PDF]. ¡Atención! Este artículo está sujeto a Derechos de Autor. © ITeC.


Semaforo amarillo.png Este artículo es, por ahora, un primer esbozo. Si tienes más información al respecto o eres un experto en este tema puedes ampliarlo y ayudar, de esta manera, a otros compañeros de profesión y a la mejora del sector de la construcción. Aprende cómo colaborar con la Construpedia.

Este aparato mide el tiempo de recorrido de una onda ultrasónica dentro del hormigón, entre un transductor emisor y un transductor receptor, acoplados al hormigón que se ensaya. La velocidad de propagación obtenida tiene una relación directa con los parámetros elásticos del material (E, v) e indirecta con las propiedades resistentes.

No existe una relación estándar entre la resistencia y la velocidad de propagación, sino que hay que establecer la correlación adaptada a cada uno de los casos.

Este método, no destructivo, es económico y sencillo, y tiene la ventaja respecto al esclerómetro, que la medida afecta a la masa de hormigón. Aparte de las aplicaciones comentadas para el esclerómetro, el ultrasonido se utiliza también para detectar discontinuidades internas, tanto en la calidad de los materiales como en el caso de grietas, fisuras y coqueras.

Afectan a la lectura de la velocidad de impulso ultrasónico:

  • las fisuras perpendiculares a la línea de propagación,
  • la presencia de armaduras,
  • el grado de humedad,
  • el tamaño de los áridos (tamaño máximo 20 mm),
  • el contacto entre los transductores y el hormigón,
  • la distancia entre transductores,

por lo cual es recomendable que haga la lectura un técnico especializado.

En el caso de vigas de forjado es difícil encontrar una zona adecuada para el ensayo: es necesario un recorrido mínimo de 10 cm . Si se colocan los dos transductores en la misma superficie (ex. cara inferior) se miden ondas superficiales y, por tanto, no hay la representatividad de toda la masa . Además, la armadura inferior puede afectar excesivamente al resultado. El lugar más representativo sería entre las caras de las alas superiores e inferior de la viga, pero la primera no es fácilmente accesible.

De todos los factores que afectan al resultado del ensayo, tiene especial interés la edad del hormigón . Parece que la velocidad de propagación se ve poco alterada a partir de los 28 días y, por tanto, la estimación de la resistencia se hace más imprecisa con el tiempo, y es cuestionada por numerosos autores.

La norma UNE 83308-72 recoge las condiciones de realización de este ensayo.