Los Cuatro Pasos de los SAT. Fotografía Actual y Retos Futuros

De Construmatica


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Según la Estrategia Internacional para la Reducción de Desastres (EIRD):

Los sistemas de alerta temprana incluyen tres elementos, a saber:

1. Conocimiento y mapeo de amenazas;

2. Monitoreo y pronóstico de eventos inminentes;

3. Proceso y difusión de alertas comprensibles a las autoridades políticas y población, así como

4. Adopción de medidas apropiadas y oportunas en respuesta a tales alertas .

(Estrategia Internacional para la Reducción de Desastres de NN.UU. http://www.eird.org/esp/terminologia -esp.htm).

1 El primer paso de conocimiento y mapeo de amenazas se debe hacer de forma regular y mantenerlo actualizado.

Para saber de qué nos tiene que alertar el sistema, hemos de tener un mapa de amenazas claro y ponderado que nos permita calibrar el tamaño del peligro que se acerca. Generalmente, los sistemas multiamenaza no suelen ser muy efectivos, así que si un territorio se encuentra dentro de una zona de riesgos múltiples, es conveniente que cuente con diversos sistemas de alerta temprana.

El cambio climático esta dificultando este primer componente para todas las amenazas relativas a fenómenos hidro-meteorológicos, que son aquellas que se ven alterados por el calentamiento global. El cambio de los patrones térmicos trastorna el conocimiento de ciclones y sequías, y exige una revisión continua de su evolución y nuevos mapeos.

2 El segundo componente, relativo al monitoreo y pronóstico de eventos, es el que requiere la mayor dedicación de recursos humanos y financieros. Una vez identificada la amenaza, la vigilancia no cesa. Los diferentes tipos de eventos hacen también muy diversa la forma de actuar en esta fase. Para las amenazas climáticas de implementación lenta (sequías fundamentalmente), el monitoreo es un factor básico.

Para otras, de implementación rápida, generalmente asociadas a lluvias y ciclones, el pronóstico meteorológico es fundamental. Para eventos sísmicos, el margen de incertidumbre suele ser mayor, aunque se están realizando buenos avances en lo relativo a monitoreo.

3 En el tercer paso, el de alerta, se empieza a pasar del campo científico al político. Con la información en la mano y nunca con un grado de certeza del 100%, se tiene que decidir si se alerta a la población y en que grado. El miedo a que un SAT se convierta en el "Sistema del Pastorcillo Mentiroso" motiva a ser comedido en la alerta.

4 La EIRD hace bien en citar la toma de medidas como un cuarto componente de los SAT, o primero de una siguiente fase.

Esta conexión que parece obvia es muy difícil de conseguir. No se trata sólo de la decisión política, sino que también incluye el desarrollo y mantenimiento de sistemas de preparación para respuesta. Para que nos entendamos: lo caro no son las sirenas que avisan ante un desastre (aunque detrás de la sirena esta todo el SAT y la decisión de activarla); lo costoso es tener preparada una evacuación en proporción a la amenaza y poder ejecutarla. De nada sirve lo primero si no se desarrolla y mantiene en el tiempo lo segundo.

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