Domótica y Climatización

De Construmatica

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La Calefacción y el Aire Acondicionado son los principales consumidores de energía en un edificio. Para la mejor eficiencia energética de la instalación de climatización (ya sea calefacción, aire acondicionado o ambos sistemas) hay que dividir su función en zonas independientes de regulación y programación. Cada zona definida tendrá requisitos de uso o condiciones térmicas distintas, que hacen conveniente gestionarlas de forma independiente, incrementando, con ello, las posibilidades de ahorro y confort.


Los criterios seguidos más habituales para definir una zonificación son:

  • La actividad que se realiza en una dependencia. Por ejemplo dormir, trabajo de oficina, montaje industrial o almacenamiento.
  • El horario y frecuencia de uso de la dependencia. Para una vivienda podría ser por ejemplo una zona día (uso habitual durante el día como el comedor, el salón, etc.) y zona noche (habitualmente limitada a las habitaciones), o para una oficina zonas de uso continuo a lo largo del día, como la oficina y los baños, o zonas de uso esporádicos, como una sala de reuniones.
  • La orientación de la zona, considerando los aportes energéticos solares, etc. diferenciando por ejemplo la zona norte (estancias no expuestas a la radiación solar), la zona sur (con incidencia solar) y las zonas no afectadas por la orientación.

El control centralizado y zonificado de la climatización permite optimizar el grado de confort, al asegurar la temperatura deseada por el usuario en cada una de las zonas disponibles, al la vez permite reducir el consumo de energía al incrementar la eficiencia global de la instalación ya que sólo se climatizan aquellas zonas que son necesarias y al nivel necesario.

La programación de la climatización por zonas suele basarse en la definición de perfiles de temperaturas en cada zona. Un perfil de temperatura está caracterizado por la definición de una serie de intervalos de tiempo en los que el sistema de climatización alcanzará una temperatura preestablecida a la que se denomina temperatura de consigna.


Los tipos de niveles de temperatura más comunes son los siguientes:

  • Nivel de temperatura de confort. Es el estado habitual de funcionamiento de la climatización, que se da, por lo general, cuando los usuarios se encuentran en la zona dependiendo de la actividad. Por ejemplo, una temperatura de consigna de 22ºC para calefacción en una oficina.
  • Nivel de temperatura de economía. Estado de funcionamiento que se da por un corto período de tiempo, o bien durante aquellos períodos en los cuales no se requiere un nivel de temperatura tan elevado (si se considera la calefacción) o tan bajo (si se considera el aire acondicionado). Un ejemplo de ello sería el uso de calefacción durante la noche al acostarse, con una temperatura de economía de 18ºC.
  • Nivel de temperatura antihelada. Con el objeto de evitar que el agua contenida en las conducciones de agua en el edificio se hiele en invierno y produzcan roturas en las mismas, el sistema de calefacción se puede poner en marcha para alcanzar una temperatura mínima establecida por el sistema. Por ejemplo la una temperatura de 3ºC en una casa de campo vacía o en unos almacenes durante las vacaciones de Navidad.


Pero no siempre el usuario se siente confortable con la temperatura programada, por lo cual, se puede permitir al usuario modificar el nivel de temperatura existente (de confort a economía, o viceversa) forzando un cambio puntual en el perfil de temperatura. A este cambio puntual se le conoce como derogación el nivel de temperatura existente. De la misma manera se puede integrar el control de la climatización con otros automatismos y sensores, por ejemplo al detectar la apertura de una ventana en una habitación de un hotel en el verano, se puede desconectar de forma automática el sistema de refrigeración.

Una correcta protección solar mediante persianas y toldos contribuye a un mejor aprovechamiento de la energía necesaria para obtener una adecuada temperatura de confort y ahorro en el consumo energético dentro del edificio. Persianas y Toldos motorizados y automatizados pueden ser programados de actuar (subirse, bajarse, regularse) a base de la luz y la temperatura externa, el horario, y la fecha del año, etc. en combinación con el clima interior deseado.


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