La Coordinación Dimensional en el Proyecto: Conclusiones

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No se pueden establecer procedimientos para obtener una buena coordinación dimensional basados en patrones únicos y cerrados. Son estrategias en constante evolución que hay que valorar en cada caso según el esfuerzo que exigen y las ventajas que proporcionan.

Es necesario que los arquitectos proyectistas conozcan mejor los formatos concretos y disponibles de los productos del sector de la construcción. En este sentido, sería interesante crear bibliotecas informatizadas de bloques gráficos que representasen las medidas de los productos más comunes.

Hay que exigir en todos los proyectos la representación expresa de la retícula de referencia empleada y que todas las medidas de posición sean absolutas y referidas a la red de referencia; dicho de otro modo: se debe evitar el uso de medidas relativas.

Hay que destacar con negrita las cotas "críticas", aquellas que siempre deberán ser objeto de control a pie de obra, y resaltar con rojo aquellas cotas que pueden funcionar como "almohada de absorción" de las cotas restantes, en caso de que se produzcan errores.

Con vistas a la coordinación dimensional, hay que buscar soluciones específicas para los edificios convencionales respecto de los edificios industrializados: los primeros gozan de tolerancias que son muy generosas porque la capa "gruesa" o la "cámara de aire" lo absorben todo; los segundos, al ser construidos en seco y con uniones con "capa fina", tienen tolerancias más estrictas. El hecho de mezclar los dos procedimientos de construcción en un mismo edificio es, quizá, la peor situación, aunque es lo que suele ocurrir en la mayor parte de los casos.

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