El Ejemplo del Servicio del Agua. El Acceso a los Servicios Urbanos y la Urbanización en los Países del Sur

De Construmatica

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El Servicio del Agua en la Historia

En la antigüedad el hombre situaba los primeros asentamientos junto a una fuente de agua natural y realizaba sus necesidades en medio de la naturaleza. La acumulación de asentamientos le llevó a buscar sistemas alternativos; de ahí surgieron los pozos las del Palacio de Minos en Creta (EVANS, 1964).

Más tarde la civilización mesopotámica desarrolló canalizaciones en el interior de los palacios de Babilonia de los que se han descubierto restos en el palacio de Korsabat.

Posteriormente los romanos extendieron un sistema combinado de abastecimiento a través de acueductos y de saneamiento a través de canalizaciones en la mayoría de asentamientos urbanos. La Cloaca Máxima de Roma, con una anchura de 2,10 m que llegaba en algunos puntos a 5 m, representó un punto álgido del desarrollo de esta civilización que sucumbió con la caída del Imperio Romano.

Observamos, pues, que las redes de servicios han sido siempre la expresión de un sistema urbano organizado.

En la Barcelona del siglo XIV, una de sus épocas de máximo esplendor, se creó una red de fuentes públicas abastecidas por una fuente natural de Montjuic canalizada hacia el centro histórico, y hasta mediados del siglo XIX, otra época floreciente, no se inició una red de abastecimiento de agua a las viviendas. En 1822 la red de fuentes públicas se extendió a los conventos y el acceso de la red a las viviendas no llegaría más que a partir de 1869, con la creación de la Compañía de Aguas de Barcelona.

Este proceso se alargó durante toda la segunda mitad del siglo XIX, de modo que sólo en 1895 la red de abastecimiento se extendía al conjunto de municipios del llano de Barcelona (MAGRINYÀ, 2001). Durante este periodo de transición continuó existiendo el principio rural de que cada vivienda generaba su pozo de agua de acceso individual, práctica que fue significativa durante gran parte del siglo XX y que no se extinguió hasta fines del siglo XX.

En muchos de los momentos del proceso la red estaba desarrollada, pero los usos del agua todavía no. Una muestra de ello es la anécdota de que en la extensión de la red de saneamiento en 1914 se constataba que las cloacas sufrían de estancamientos por defecaciones porque no llegaba el suficiente caudal de aguas negras para arrastrarlas.

Hasta la llegada de las sucesivas inmigraciones, principalmente en las olas de 1920-1930 y de 1950-1960 no se desarrolló de forma extensiva el mecanismo de conexión a la red frente a los pozos de agua. Posteriormente las dificultades se concentraron en las inundaciones de los puntos bajos de evacuación al río y al mar. Los planes de los 50 (Jara y Peña) y más tarde el Plan Vilalta de 1969 afrontaron claramente este problema que no se subsanó hasta la década de 1970. Pero los problemas de inundaciones en los barrios de la costa no se resolvieron hasta la celebración de los Juegos Olímpicos de Barcelona de 1992.

De este caso de Barcelona, que no deja de ser un ejemplo de una ciudad europea desarrollada, se constata que, si bien la red de abastecimiento de agua se extendió progresivamente durante décadas (1822-1895), el uso del agua no aumentó significativamente hasta bien entrado el siglo XX y los problemas de inundaciones no se eliminaron totalmente hasta finales de dicho siglo; es decir, casi doscientos años más tarde del inicio de la red de abastecimiento.

En este proceso se observa a su vez que existe una ligazón muy íntima entre el proceso evolutivo de la vivienda y del servicio urbano.

Se constata, por ejemplo, que en 1960 Barcelona disponía de barracas en la montaña de Montjuic y a lo largo de la línea de la costa cuando todavía estaban construyéndose los grandes colectores de saneamiento de la ciudad.

En definitiva, una lectura histórica de la evolución de las redes y los asentamientos en los países del Norte nos ofrece muchas pistas de lo que hoy sucede en el Sur porque, aunque el entorno sea distinto, los mecanismos en juego son en esencia muy parecidos.

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